¿Ustedes también quieren irse?

Para Juan la vida ha sido difícil. Parece que todo le cuesta el doble. Parece que la vida lo vive maltratando. Enfermedades, muertes, dolor, llanto, despedidas, lo ha sufrido todo. Mientras más se acerca a Dios todo parece más complicado. Hasta en su misma comunidad encuentra problemas. Hoy está en un profundo pozo, y no ve la luz, no encuentra salida. Piensa dejarlo todo, piensa abandonarlo todo. No quiere vivir más, para qué se pregunta si dar un paso es sufrir nuevamente, si hasta la respiración le cuesta. No quiere vivir más, si todo parece oscuro, si parece que el futuro no va a mejorar.   Desearía encontrar unos brazos en donde descansar aunque sea un rato.

Después de escuchar la enseñanza de Jesús, muchos de sus discípulos decían: "¡Es duro este lenguaje! ¿Quién puede escucharlo?". Jesús, sabiendo lo que sus discípulos murmuraban, les dijo: "¿Esto los escandaliza? ¿Qué pasará, entonces, cuando vean al Hijo del hombre subir donde estaba antes? El Espíritu es el que da Vida, la carne de nada sirve. Las palabras que les dije son Espíritu y Vida. Pero hay entre ustedes algunos que no creen". En efecto, Jesús sabía desde el primer momento quiénes eran los que no creían y quién era el que lo iba a entregar. Y agregó: "Por eso les he dicho que nadie puede venir a mí, si el Padre no se lo concede". Desde ese momento, muchos de sus discípulos se alejaron de él y dejaron de acompañarlo. Jesús preguntó entonces a los Doce: "¿También ustedes quieren irse?". Simón Pedro le respondió: "Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de Vida eterna. Nosotros hemos creído y sabemos que eres el Santo de Dios". Jn 6, 60-69

¿Quién dijo que iba ser fácil? Seguir a Cristo no es fácil. Querer se un cristiano coherente tampoco es fácil. Es un trabajo duro, son muchas exigencias. Muchas veces sentimos que el barco se hunde y deseamos abandonarlo todo. Muchas veces hasta en la misma iglesia encontramos problemas, encontramos una reproducción en pequeño de todas las miserias del mundo. Y sentimos la tentación de decirle a Jesús: Si señor, yo también quiero irme, porque no me hacés la vida más fácil, porque tomo m cuesta un poco más. Si señor, yo también quiero irme porque no puedo más.

Y en lo profundo de ese pozo Dios quiere decirte las siguientes palabras: Hace tiempo tenía ganas de decirte estas palabras. Espero que no sea tarde…

                La vida se ha abierto paso en vos. Ante tantas situaciones de muerte, la vida se ha jugado la vida para que vos estés vivo. Dios mismo se ha jugado la vida para que estés vivo. Por eso no te contentés con sólo existir.  Sos más que un mouse conectado a una computadora.

                Querido joven, que no te roben tu copyright, no sos una copia más. Buscá ser autentico, ser vos mismo.  A vos te toca hacer algo especial, para eso existís. Este es tu tiempo, este es el tiempo de los protagonistas. No dejés que te nominen, no dejés que te mantengan al borde del juego. Esta es tu partida, tenés todas las cartas para ganar. Y si perdés, porque en algún momento te tocará perder, aún así ¡No te Rindas!

Sé que las cosas son difíciles. Si sufres piensa que yo sufrí primero, si caes piensa que yo caí primero.

                La gente no tiene compasión, se burlan o nos ignoran, el mundo no fue hecho para oir tu  canción. Muchos adultos te desalentaran porque ellos han fracasados en sus sueños, no los juzgués. Sueña, sueña a lo grande, con los pies en la tierra, sueña.

                Te admiro por lo que sos en verdad, te admiro por tus búsquedas y te admiro mucho más por todo lo bueno y mejor que podés ser. Creo en vos. Creo en tus sueños, creo en tus ilusiones, creo en tus palabras.

                El mundo solo se ríe de lo que no puede imitar, los mediocres se burlan de aquellos que no pueden alcanzar. No dejés que te digan que no podés, la juventud es el tiempo de los intento. No dejés que te vendan, ni que te compren. No dejes que te esclavicen a un celular, ni que te aten a una play. Sos más que un comprador o un consumidor. Recuerda que valés por lo que sos, y no por lo que tenés. No te apurés ni quemés etapas. No seas uno más entre el montón. Buscá ser autentico. Hay luz en vos, no la escondás. Hazla brillar, aliméntala para que puedas iluminar a muchos jóvenes que están en tinieblas. El mundo se puede cambiar, sólo basta con que vos te decidás a cambiarlo. Es más, el mundo ya cambia cuando vos elegís cambiar.

                Cae pero no te rindas, llora pero no te rindas. No te rindas, que no estás solos, hay gente para la que sos importante. No te rindas, toma mi mano. Lucha, pelea, ama, juégate por la vida, como la vida se la juega por vos, como yo me la juego por vos.

                Y cuando te rindas y caigas sin valor recuerda lo que yo pienso de ti, recuerda que vos sos lo mejor que puede haber en este mundo gris.

                ¿Por qué vuelas bajito cuando tienes alas de águilas? ¿Por qué te conformas con poco si podés más? ¿Por qué abandonas tan rápido lo que nos hace bien? ¡No te limités!

                A veces avanzarás y otras retrocederás, pero nunca dejés de aprovechar la oportunidad de estar BIEN. Hay tantas herramientas, les dí tantas herramientas para que estén mejor, y sin embargo muchas veces prefieren quedarse solos. Busca ayuda, busca compañía, hay muchos que están como vos, ¿por qué no ayudarse? Haz el mejor intento!!!

                Querido joven si querés trascender no hay nada más esfimero que internet. Querido joven si querés trascender sírvete ser protagonista de tu propia historia. Es con acciones de compromisos hacia los otros con la que se marca a fuego la línea del tiempo.

                Vos sos valioso, lo creas o no. Hazte valer. Y no olvidés de mirar a los costados y hacía atrás que también hay otras personas, otros jóvenes, que también valen como vos.

                Busca la justicia, y se justo. Busca la verdad, y se verdadero. Busca el bien, y se bueno.

                Te necesito para hacer de este mundo un mundo mejor. Por eso aunque el mundo diga lo contrario: Vos no te rindas.

Y espero que algun día puedas decir como dijo Pedro: ¿A quién iremos, Señor? Si tú tienes palabras de Vida eterna.

Andrés Nicolás Oregón

Inspirado en el tema “No te rindas” de Martín Valverde.