viernes, 5 de noviembre de 2010

Carlos de 16 fuma paco...


/dandoviiidaaa
 "Dios de Vida"


Camila tiene 14 años. Ha quedado embarazada, su novio quiere que aborte. Tomás con sólo 12 años sale a robar todos los días en el subte cuando la gente se amontona. Carlos de 16 fuma paco. Aldo corre picadas y quizás no llegue a cumplir los 15. Eduardo se hace cortes en la piel. Tamara es alcohólica. Cesar vende porros. Luis es prostituido por vivir en la calle. Todos jóvenes. Casi niños.


En aquel tiempo, se acercaron a Jesús unos saduceos, que niegan la resurrección, y le preguntaron: "Maestro, Moisés nos dejó escrito: Si a uno se le muere su hermano, dejando mujer, pero sin hijos, cásese con la viuda y dé descendencia a su hermano. Pues bien, había siete hermanos: el primero se casó y murió sin hijos. Y el segundo y el tercero se casaron con ella, y así los siete murieron sin dejar hijos. Por último murió la mujer. Cuando llegue la resurrección, ¿de cuál de ellos será la mujer? Porque los siete han estado casados con ella."

Jesús les contestó: "En esta vida, hombres y mujeres se casan; pero los que sean juzgados dignos de la vida futura y de la resurrección de entre los muertos no se casarán. Pues ya no pueden morir, son como ángeles; son hijos de Dios, porque participan en la resurrección. Y que resucitan los muertos, el mismo Moisés lo indica en el episodio de la zarza, cuando llama al Señor "Dios de Abrahán, Dios de Isaac, Dios de Jacob. Porque Él no es Dios de muertos, sino de vivos; porque para él todos viven” Lc. 20, 38

Vivimos una cultura de la muerte. Una cultura en la que todo lo que no sirve se tira. Una cultura que nos mantiene al borde del suicidio. Cuántas situaciones de muerte vivimos a diario. Tantas que hasta se nos naturalizan, tantas que se nos vuelven cotidianas. Cuántas veces habremos visto a jóvenes como Camila, Tomás, Carlos, Eduardo y tantos otros sin nombres muriéndose lentamente ante nuestros ojos, sufriendo la agonía de la muerte en vida. Tanta veces los vimos que se han hecho invisibles.

Mientras tanto, los sacerdotes, los pastores, los políticos, los maestros, los padres están preocupados en otros asuntos. Unos mirando al cielo, otros llenándose los bolsillos y casi todos viviendo como jóvenes. ¡Cuántos saduceos hay entre nosotros! ¡Qué saduceos que somos a veces!

Y ante tanta muerte, y tanta indiferencia, Jesús nos aclama, nos grita, nos repite: Dios es un Dios de Vida. Jesús es la Vida misma, la Vida en abundancia. Debemos tener esto en claro para llevar vida a tantos jóvenes, para inundar de vida tantos ambientes que parecen verdaderos cementerios. Debemos cuestionarnos siempre si somos comunidades dadoras de vida.

“Este es el tiempo favorable, este es el día de la Salvación” 2 Cor. 6, 2. Dejemos de mirar al cielo, y bajemos a la calle. Anunciemos a un Dios de los vivos, un Dios que da vida, abracémonos a él para dar vida y dar la vida.

Etiquetas

Lucas Juan amor Marcos 6 Marcos 1 embarazo juan 20 alcoholismo autoengaño desilución despreciado esclavitudes navidad paralisis resurrección Agua Viva Corintios Jeremías Juan 1 Juan 10 Lucas 9 Marcos 10 Marcos 7 Marcos 9 Mateo 25 Samuel bautismo creer en uno mismo cuentos culpa duelo fe imperfecto indiferencia intenta juan 15 lágrimas mediocres noviazgo oportunidad padre misericordioso parto pastor permanecer robo soledad testimonio tranquilidad violencia 1 Corintios 10 1 Juan 1 1 Juan 5 1 Pedro 4 2 tesalonicenses 3 Apocalipsis 22 Constanza Cordero David Deuteronomio 32 Elías Emaús Evangelio de Andrés Ezequiel Génesis Génesis 1 Hebreos 12 Hechos Hijo Prodigo Isaias 49 Isaias 66 Jesús Adrían Romero José Juan 6 Juan 16 Juan 2 Juan 6 Lacas 1 Lucas 1 Lucas 10 Lucas 13 Lucas 15 Lucas 18 Lucas 19 Lucas 21 Luz Marcos 12 Marcos 16 Marcos 2 Marcos 4 Marcos 5 Marcos 8 Mateo Mateo 13 Mateo 14 Mateo 28 Mateo 3 Oseas 11 Pedro Rey Romano 13 Romanos 2 Salmo 17 Samaritana Tomás Zaqueo aborto agradecido anuncio apocalipsis atesorar año nuevo basura cambio de aceite carrera chicos de la calle comercio comida compartir creer decisión desafío descanso deseo despedidas difícil discernimiento dolares dolor domingo de ramos droga enamoramiento enojo escandalo escuela esfuerzo espíritu estigmas fallecimiento fama filipenses fin del mundo frutos futuro gloria hambre higuera huelga humildad impureza incredulo insistencia inundados joven rico juan 12 juan 3 justicia jóvenes llamado llenarnos de Dios llorar lucas 24 madre madurar marginado matrimonio mesías miedo milagros monopolios movimiento muerte multiplicación murmurar niño noche novios oración palabras de afirmación pan pasado pasión pecado peces y panes perdon prejucios presencia profeta prostitución prójimo robar rápido sacrificio salvación samaritano sanación semilla servicio señales silencio sin sentido sindicatos sordomudo sueños suicidio talitá kum templo tocar trabajo unión vasijas vid vida vivir vocación volver a empezar última cena